Escribo
para mí, para mi dicha y gozo
Para
mi desahogo y mi sosiego. Para evocar
al
ser que mantiene mi existencia, me habita,
transmite
su energía a la vida que sutil adopto
El propósito
que tienen estas letras,
que
recolecto para fantasear frases
con
un abecedario que nada innova,
es detener
mi mente, dejarla en blanco,
desconocer
lo conocido, ignorar lo sabido,
desaprender
lo aprendido
Y
no hallo modo. Exacerbado,
mi cerebro vuelve al vicioso recuerdo
Domina
e impone criterio ajeno, sin tiento,
tachando
el nuevo espejo con paisaje
emborronado
de estigmas de pasado,
garabateando
con su oriundo silabario